El 8 de mayo de 2025, la Iglesia Católica anunció la elección de su nuevo líder espiritual: el cardenal estadounidense Robert Francis Prevost, quien adoptó el nombre de León XIV. Con 69 años, se convierte en el 267º pontífice y el primero nacido en Estados Unidos en asumir el papado.

Nacido en Chicago en 1955, Prevost es miembro de la Orden de San Agustín y ha dedicado gran parte de su vida al servicio misionero en Perú. Durante una década, dirigió el seminario agustiniano de Trujillo y fue obispo de Chiclayo, obteniendo la nacionalidad peruana en 2015. Su experiencia multicultural y compromiso con las comunidades latinoamericanas han sido pilares en su trayectoria eclesiástica.

Antes de su elección, desempeñó roles clave en el Vaticano, incluyendo prefecto del Dicasterio para los Obispos y presidente de la Pontificia Comisión para América Latina. Su cercanía al Papa Francisco y su enfoque pastoral han sido destacados por observadores y fieles.

La elección de León XIV representa un momento histórico y simbólico para la Iglesia, reflejando una apertura hacia la diversidad cultural y una conexión más profunda con América Latina. En su primer mensaje «Urbi et Orbi», expresó gratitud y un firme compromiso con la unidad y la paz global.

Con desafíos como la secularización creciente, la crisis de vocaciones y la necesidad de reformas internas, el pontificado de León XIV inicia con la esperanza de renovación y continuidad en los valores fundamentales de la Iglesia Católica.